Comer, el Pan de Vida. Martes, 20 de abril 2021 (Reflexión)
- Eduardo Ibáñez García
- 19 abr 2021
- 2 Min. de lectura
Tiempo de Pascua – Ciclo B
Tercera semana
Martes, 20 de abril 2021
Primera lectura: Hechos de los Apóstoles 7, 51-60. 8,1
San Lucas, nos dice que, habló Esteban ante el sanedrín, diciendo: …Estoy viendo los cielos abiertos y al Hijo del hombre, de pie a la derecha de Dios. …Entonces, los miembros del sanedrín, …lo sacaron fuera de la ciudad y empezaron a apedrearlo. …Mientras lo apedreaban, Esteban, repetía esta oración: Señor Jesús, recibe mi espíritu. (Hechos 7, 56-57. 59)
Salmo: 30, 3-4. 6-8. 17. 21
En tus manos, Señor, encomiendo mi espíritu. Aleluya. En tus manos, encomiendo mi espíritu y tú, mi Dios leal, me librarás. En ti, Señor, deposito mi confianza y tu misericordia me llenará de alegría. (Salmo: 30, 6-8)
Evangelio: San Juan 6, 30-35
El evangelista San Juan, proclama que, la gente, le preguntó a Jesús: ¿Cuáles, son tus obras? Nuestros padres, comieron el maná en el desierto… Jesús les respondió: “Yo, les aseguro, que no fue Moisés, quien les dio pan del cielo; es mi Padre, quien les da el verdadero pan del cielo. Porque el pan de Dios, es aquel que baja del cielo y da la vida al mundo”. Entonces le dijeron: Señor, danos siempre de ese pan. (Juan 6, 30-34)
Lecturas consultadas en:
Id y enseñad,
La Biblia Latinoamérica,
La Biblia de las Américas y
Nuevo Misal del Vaticano II

Comer, el Pan de Vida
Es hacerse responsable, de la nueva ley promulgada por Jesús, que se resume en amor oblativo. Es nutrirse de la Palabra de Jesús, para hacerse alimento para los demás. Ese alimento, se traduce en fuerza, para trabajar por el Reinado de Dios, en el contexto, en que los seguidores de Jesús, les corresponde vivir.
En este tiempo de pascua, las continuas lecturas, del Evangelio de San Juan, nos señalan y ahondan progresivamente, en el tema del seguir, comer, creer y trabajar.
Seguir a Jesús, es asumir el proyecto y el estilo de vida que Él propone, basado fundamentalmente, en el amor. Por eso, comer no es solo tomar un alimento, sino interiorizar las actitudes de Jesús, en las relaciones consigo mismo, con las demás personas, con Dios y con la creación. Es una forma de vida, contrastante con el contexto sociocultural, circundante. Comer el Pan de Vida, es hacerse responsable de la nueva ley promulgada por Jesús, que se resume en amor oblativo. Es nutrirse de la Palabra de Jesús, para hacerse alimento para los demás. Ese alimento, se traduce en fuerza, para trabajar por el Reinado de Dios, en el contexto, en que los seguidores de Jesús, les corresponde vivir.
¿Cómo hacernos pan de vida, como Jesús, para los demás? ¿Qué signos de la presencia del Reino, percibes en tu entorno vital, social y eclesial?
Adaptación del texto de Servicio Bíblico Latinoamericano

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