Jesús, regresará. Viernes, 30 de abril 2021 (Reflexión)

Tiempo de Pascua – Ciclo B

Cuarta semana

Viernes, 30 de abril 2021

• Primera lectura: Hechos de los Apóstoles 13, 26-33

San Lucas, nos dice que, Pablo, continuó su predicación en la sinagoga de Antioquía, con estas palabras: Hermanos míos, Dios, lo resucitó de entre los muertos, y él, ya resucitado, se apareció durante muchos días a los que lo habían seguido de Galilea a Jerusalén. Ellos son ahora sus testigos ante el pueblo. Nosotros les damos la buena nueva de que la promesa hecha a nuestros padres nos la ha cumplido Dios a nosotros, los hijos, resucitando a Jesús, como está escrito en el salmo segundo: Tú eres mi hijo, yo te he engendrado hoy. (Hechos 13, 29-33)

• Salmo: 2, 6-12

Jesucristo, es el rey de las naciones. Aleluya. “Hijo mío eres tú, yo te he engendrado hoy. Te daré en herencia las naciones y como propiedad, toda la tierra. Podrás gobernarlas, con cetro de hierro; y despedazarlas, como jarros”. (Salmo: 2, 7-9)

• Evangelio: San Juan 14, 1-6

El evangelista San Juan, proclama que, Jesús, dijo a sus discípulos: “Cuando me vaya y les prepare un sitio, volveré y los llevaré conmigo, para que donde yo esté, estén también ustedes. Y ya saben el camino, para llegar al lugar a donde voy… Entonces, Tomás le dijo: Señor, no sabemos, a dónde vas ¿Cómo podemos, saber el camino? Jesús, le respondió: “Yo soy el camino, la verdad y la vida. Nadie va al Padre, si no es por mí”. (Juan 14, 3-6)

Lecturas consultadas en:

Id y enseñad,

La Biblia Latinoamérica,

La Biblia de las Américas y

Nuevo Misal del Vaticano II

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Jesús, regresará

Para establecer una comunidad auténtica, con todos sus seguidores. La promesa de Jesús, es la de preparar y ofrecer muchas moradas, en la eternidad; es decir, habitación para todos los que sean fieles y perseverantes, en el seguimiento del proyecto. Jesús, comunica a sus discípulos, la promesa de estar siempre con ellos.

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La expresión, no se inquieten, puesta en labios de Jesús, pone de manifiesto, su amor hacia Él, dando como consecuencia, una situación de competencia, para estar más cerca de Él; esto era, lo que vivían, las primeras comunidades cristianas.

Probablemente, había allí, un espíritu de amor y búsqueda de comprensión, del mensaje de Jesús. Por eso, tiene sentido, la promesa de Jesús, de preparar y ofrecer muchas moradas; es decir, habitación para todos los que sean fieles y perseverantes, en el seguimiento del proyecto. Jesús, comunica a sus discípulos, la promesa de estar siempre con ellos.

Él regresa, para establecer una comunidad auténtica, con todos sus seguidores. Ante la inquietud e incertidumbre de los suyos, Él, se manifiesta como camino, verdad y vida. Es decir, como proyecto, palabra y esperanza, para todo el que le sigue, sin desfallecer.

El camino, exige constancia, para poder avanzar; la verdad, implica, ser siempre auténtico; y la vida, es el aliciente, para avanzar hacia la casa del Padre, de la mano de Jesús.

Adaptación del texto del Servicio Bíblico Latinoamericano