Nosotros, no podemos, evitar la realidad. Viernes, 6 de agosto 2021 (Reflexión)
- Eduardo Ibáñez García
- 5 ago 2021
- 3 Min. de lectura
Decimoctava semana
Viernes, 6 de agosto 2021 – Solemnidad de, La Transfiguración del Señor
En el nombre del Padre, del Hijo y del Espiritu Santo. Amen
Oración:
Dios nuestro, que en la Transfiguración gloriosa de tu Hijo unigénito, fortaleciste nuestra fe, con el testimonio de Moisés y Elías; y nos dejaste entrever la gloria, que nos espera, como hijos tuyos; concédenos, seguir el Evangelio de Cristo, para compartir con Él, la herencia de tu Reino. Por nuestro Señor Jesucristo... Amén.
Primera lectura: Daniel 7, 9-10. 13-14
El profeta Daniel, proclama que, tuve una visión nocturna: Vi que colocaban unos tronos y un anciano se sentó. Su vestido, era blanco como la nieve y sus cabellos, blancos como lana. Yo, seguí contemplando, en mi visión nocturna y vi a alguien, semejante a un hijo de hombre, que venía entre las nubes del cielo. Avanzó, hacia el anciano de muchos siglos y fue introducido a su presencia. Entonces, recibió la soberanía, la gloria y el reino (Daniel 7, 9. 13-14).
Salmo: 96, 1-2. 5-6. 9
Reina el Señor, alégrese la tierra. Reina el Señor, alégrese la tierra; cante de regocijo el mundo entero. Tinieblas y nubes rodean el trono del Señor que se asienta en la justicia y el derecho. (Salmo: 96, 1-2).
Segunda lectura: 2 Pedro 1, 16-19
El apóstol San Pedro, nos dice: Hermanos, a Cristo Jesús nuestro Señor, Dios, lo llenó de gloria y honor, cuando la sublime voz del Padre, resonó sobre él, diciendo: “Este es mi Hijo amado, en quien yo me complazco”. Y nosotros escuchamos esta voz, venida del cielo, mientras estábamos con el Señor, en el monte santo.(2 Pedro 1, 16-18).
Evangelio: San Mateo 17, 1-9
El evangelista San Mateo, proclama que, Jesús, tomó consigo a Pedro, a Santiago y a Juan, el hermano de éste; y los hizo, subir a solas con él, a un monte elevado. Ahí se transfiguró, en su presencia; su rostro, se puso resplandeciente como el sol y sus vestiduras, se volvieron blancas como la nieve. De pronto, aparecieron ante ellos, Moisés y Elías, conversando con Jesús. (Mateo 17, 1-3).
Lecturas consultadas en:
Id y enseñad,
La Biblia Latinoamérica,
La Biblia de las Américas y
Nuevo Misal del Vaticano II
La Transfiguración, del Señor Jesús
Esta festividad recuerda, la escena en que Jesús, en la cima del monte Tabor, se apareció, vestido de gloria, hablando con Moisés y Elías, ante sus tres discípulos preferidos, Pedro, Juan y Santiago.
Porque tenemos que, seguir dando testimonio de nuestra fe, aun cuando el temor y los acontecimientos, que se presenten en nuestro camino, nos quieran superar. Que Jesús transfigurado, sea de mucha importancia para nosotros, en el proceso para reafirmar nuestra fe y en el seguimiento de su doctrina.
Los Evangelios sinópticos (Mateo, Marcos y Lucas), narran la transfiguración. La comunidad de San Marcos, cuyo texto leemos hoy, está integrada, en su mayoría, por personas de origen pagano; es una comunidad pobre, en crisis; llamada, a dar razón de su fe e identidad.
Para esta comunidad, la experiencia de Jesús transfigurado, será de mucha importancia, en el reafirmar su fe y su seguimiento. El Evangelio, quiere decir, que la Ley y los Profetas, están al servicio y tienen sentido, porque es la realidad de la vida Jesús, que es el Señor, en su gloria; en función de quien, está toda la Sagrada Escritura.
La propuesta de San Pedro, de quedarse en la montaña, es una insinuación, para no afrontar, el futuro próximo de Jesús; que seis días antes, les había anunciado, su pasión.
Nosotros, al igual que la comunidad de San Marcos, no podemos, evitar la realidad, tendremos que, seguir dando testimonio de nuestra fe, aun cuando el temor y los acontecimientos, nos quieran superar.
Adaptación del texto de
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